Se me está acabando la botella, y os iba a hablar de lo bien que marida este vino semidulce con D.O Rioja con los dulces de tipo libanés como los que nos sirvieron en una reciente cena clandestina de women in wine. La foto de arriba es de la gran Hossana de Arrue, experta en vinos conocida por su fantástico blog Queridilla.
Según Elena Adell, enóloga de Campo Viejo, “Quizás el gran atractivo de Campo Viejo Semi Dulce sea precisamente que es un vino goloso, pero a la vez fresco. Su dulzor no es nada pesado, resultando muy interesante para tomar como aperitivo, pero también para acompañar los platos que tradicionalmente
piden un blanco dulce”.
Servido bien fresquito convierte una simple tortilla a la francesa en una gran cena. Y por supuesto, con una tapita de foie o un plato de quesos forma un matrimonio sublime como el de Hilaria y Alec Baldwin, que ya van a por el cuarto bebé.
Y ahora os voy a hablar de los detalles, parte de una selección de uvas de la variedad Viura, a las que
se somete a un suave prensado para obtener el mosto yema. Este mosto es desfangado para dejarlo limpio y proceder a su fermentación a baja temperatura (en el entorno de los 14-16ºC). Se precisa de una levadura seleccionada especialmente para la elaboración de blancos dulces. Esta levadura es muy sensible al frío, de tal forma que cuando alcanza el nivel de azúcar residual preciso, para la fermentación con un
“golpe de frío” y así se mantiene muy frío hasta el embotellado.
El vino tiene un color muy atractiv, palido, pajizo, con destellos acerados. Aromáticamente
muy agradable, con notas de frutas y flores blancas. En boca es muy perfumado y con un gran equilibrio entre el frescor que le aporta su acidez y el dulzor de le aporta el azúcar. Un día os enseñaré un estuche que tengo con aromas para aprender a distinguir los aromas en las catas.
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